El anís proviene originalmente de la región mediterránea y comenzó su carrera como planta medicinal y especia hace más de 3000 años. Tiene un sabor dulce y aromático y el olor recuerda ligeramente al regaliz. El anís añade un toque especial a muchos platos de carne y pescado, pero va igual de bien con la compota. Sin embargo, es más apreciado en la repostería navideña, ya que nuestras galletas, pan de jengibre o bizcocho de miel sólo adquieren su sabor especial con el anís. Hablando de Navidad, habría otro favorito sin anís: ¡vino caliente! Además del clavo, la canela y el cilantro, es el anís el que le da a la popular bebida caliente su aroma típicamente navideño especiado.
- Tapa de dosificación de 3 etapas (fino, grueso, abierto)
- Recargable en posición “abierta”
- Resellable
- Protegido contra el aroma y la luz
- Óptica atractiva
- Etiqueta también en la tapa para su almacenamiento en el cajón